Con la finalidad de prevenir cualquier tipo de riesgo asociado al desbordamiento del río Tuluá, la Secretaría de Gobierno realizó una visita de inspección a un predio invadido de manera ilegal por aproximadamente 25 familias, que llegaron al lugar ubicado en el sector del barrio San Francisco.
La oportuna reacción de la Administración Municipal que contó con el acompañamiento de la Policía Nacional, se realizó para determinar los factores de riesgo a los que están expuestas estas personas que están construyendo sus cambuches en plástico, guadua , esterilla y madera a escasos 10 metros del cauce del afluente.
Los funcionarios se pusieron en contacto con las familias invasoras con el propósito de explicarles que se encuentran en un sitio de alto riesgo, colocando en peligro su vida y la de los miembros más vulnerables de la comunidad, como niños y adultos mayores, por lo que será necesario proceder con el proceso de desalojo.
“Atendiendo el llamado de la misma comunidad del sector nos dirigimos al sitio para socializar con estas familias sobre los peligros a los que se están exponiendo, explicándoles que nuestra obligación es dar inicio a los trámites legales pertinentes para su demolición y desalojo, con el fin de proteger sus vidas”, indicó Carlos Octavio Quitián, secretario de Gobierno.
Comunicado de Prensa No. 280.56.1.141