
Hasta el próximo lunes, el salón Palomestizo de la Casa de la Cultura, tiene abierta la exposición de cuadros realizados por los internos de la cárcel de Tuluá, quienes se inspiraron en el libro ‘El Suplicio’, de Humberto Eco, plasmando las impresiones generadas en ellos por el texto que narra las torturas que se imponían con diferentes artefactos en la época medieval.
La exposición que reúne un total de 24 cuadros son ilustraciones efectuadas en carboncillo y buscan dar a conocer las manifestaciones artísticas de los reclusos que siguen el camino de la resocialización a través de las expresiones pictóricas, además de recordar una época de la humanidad en la que se infringió un dolor que nunca debió existir.
Los espectadores podrán encontrar ilustrado en las piezas artísticas instrumentos de tortura de la época, como la sierra, la guillotina, la hoguera, el anillo que se ponía en la cabeza de los condenados, entre otros artefactos; en la parte inferior cada cuadro tiene una breve reseña de su explicación y uso.
Una vez finalice la exposición, los internos enviarán nuevos cuadros a la Casa de la Cultura, obras que tienen como inspiración sus sentimientos, vivencias, familia o amigos, representaciones artísticas de carácter propio que serán vendidas a los interesados.