Aproximadamente 300 tejas de zinc han sido entregadas por la Oficina de Gestión del Riesgo Municipal, adscrita a la Secretaría de Gobierno, a diferentes personas que resultaron damnificadas tras el fuerte vendaval que azotó la primera semana de marzo, al municipio de Tuluá.
Desde el mismo día que se presentó la emergencia, los organismos de socorro y los profesionales de la oficina de Gestión de Riesgo visitaron las viviendas que resultaron destechadas para atender a sus habitantes, y luego de realizar el respectivo proceso se dio inicio a la entrega de las ayudas requeridas.
Estos elementos fueron donados a familias de la zona urbana y rural del Municipio, especialmente de los barrios La Santa Cruz, La Paz, San Francisco, las veredas La Rivera, La Coca y el corregimiento de La Marina, que fueron los sectores más afectados.
“Hemos venido realizando un seguimiento a las personas que resultaron afectadas con el vendaval, verificando su situación y brindándoles las ayudas y el acompañamiento necesario para solucionar los inconvenientes presentados en sus viviendas por los fuertes vientos”, expresó Edwin Triana, coordinador de Gestión del Riesgo.