En planes de control realizados por el personal de la Subestación de Policía de La Marina, se llevó a cabo el cierre de un centro recreacional ubicado en dicho corregimiento, donde varias personas estaban ingiriendo licor y mantenían la música a alto volumen cuando ya eran las 2:40 de la mañana.
Teniendo en cuenta que el permiso para los establecimientos públicos en la zona rural de Tuluá es hasta las 12:00 de la noche, las autoridades procedieron a realizar la suspensión temporal de la actividad y el respectivo comparendo en aplicación al Código Nacional de Policía y Convivencia. 
Con el objetivo que este tipo de casos no se vuelvan a presentar en el corregimiento, los policiales realizaron una reunión con los propietarios de los establecimientos de La Marina, a quienes se les recordó el cumplimiento del decreto número 280-018 de febrero 13 de 2015, por medio del cual se establece el horario de cierre de los establecimientos públicos con venta y consumo de licor y venta de comidas rápidas, expedido por la Alcaldía de Tuluá.
Asimismo, los uniformados socializaron el nuevo Código Nacional de Policía y Convivencia, haciendo énfasis en el título VIII, capítulo I de la actividad económica y su reglamentación y el capítulo VIII de comportamientos que afectan la actividad económica, y las medidas correctivas.
