Tecnología obsoleta y poco funcional y un único proveedor son algunas de las razones que hoy tienen al municipio de Tuluá con varios puntos semafóricos dañados, a medio funcionar o en avanzado estado de deterioro por el inapropiado o nulo mantenimiento.
Así se evidenció tras los trabajos realizados en más de 10 puntos semafóricos que amanecieron sin servicio el pasado domingo, de los cuales fueron reparados ese mismo día cinco. “La contratación que se hizo en el pasado para el mantenimiento no atacó el problema de fondo que es el eléctrico y la raíz de todos los demás”, explicó el director de las TIC, Alexánder Ricardo.
El Funcionario indicó que además los semáforos no cuentan con sistemas de protección ni aterrizaje, lo que genera que con cualquier llovizna le caiga agua a las tarjetas electrónicas ocasionado que se quemen y haya que remplazarlas por nuevas, ocasionando costos altísimos a la ciudad.
Ricardo dijo que ingenieros eléctricos y electrónicos que pertenecen a la planta de personal de la Alcaldía Municipal están corrigiendo estas deficiencias y que ya está en trámite la adquisición de nueva tecnología para superar los inconvenientes generados por esta situación.
