
Varias dependencias de la Administración Municipal trabajaron el pasado lunes hasta altas horas de la noche para monitorear y controlar la situación que se presentó con la creciente repentina del río Tuluá, debido a las fuertes lluvias que se registraron en la zona montañosa.
Maquinaria pesada del Municipio y organismos de socorro se trasladaron hasta la calle 22, donde se realizan los trabajos de construcción del puente, para retirar de forma adecuada los troncos que quedaron estancados sobre las estructuras de hierro que sostienen las vigas de la obra, además se tenía previsto retirar material de los costados del río en caso de seguir subiendo el caudal.
Los trabajos coordinados de descolmatación que se han efectuado, permitieron que la situación se controlara y no se presentaran desbordamientos e inundaciones en sectores del Municipio, asimismo, el constante monitoreo del cauce del afluente en la zona rural ayuda a adelantar acciones controladas para evitar situaciones que lamentar.
El coordinador del Consejo Municipal para la Gestión del Riesgo, Edwin Triana, manifestó, “los tulueños deben de estar tranquilos, pues tenemos la situación controlada y todos los protocolos para el plan de contingencia están activados. El río Morales y otros afluentes también se están monitoreando, vamos a realizar una evaluación sobre todo el caudal, que afortunadamente está descendiendo”.